Os traigo una idea para tomar pollo a la plancha de forma que esté jugoso. Me valgo de una receta de salsa chimichurri que, a mi juicio, queda muy sabrosa.
Los ingredientes que se necesitan son:
- Medio tomate.
- Media cebolla.
- Un ajo o ajo en polvo (al gusto).
- Una guindilla.
- Pimentón dulce (una cucharada de postre)
- Perejil fresco (unas hojas).
- Orégano seco (al gusto).
- Tomillo (al gusto).
- Comino en polvo (al gusto).
- La piel rallada de medio limón.
- Un chorro de vinagre de Jerez.
- Un chorro de vinagre de vino blanco.
- Un chorro de aceite de oliva.
- Pollo fileteado (yo usé tres pechugas para cinco personas).
- Sal
Los pasos que seguiremos son:
1.) Picamos lo más fino que podamos la cebolla y el tomate (y el ajo, si usáis). En un cazo, lo mezclamos con las hierbas y la ralladura de limón. Lo mezclamos todo bien y añadimos sal, el aceite y los vinagres. Volvemos a mezclar.
2.) Añadimos un chorrito de agua y lo dejamos cocer un poco. Lo pasamos.
3.) En un recipiente se pone la mayoría de la salsa y se baña el pollo en ella. Dejaremos macerar un mínimo de una hora en la nevera.
4.) Cuando lo vayáis a consumir, sacadlo de la nevera y, sobre la plancha (o sartén), haced el pollo a la plancha, echando un poco más de sal sobre el pollo. Y listo.
¡¡Quedará muy rico y jugoso!!
EL TRUCO: La salsa chimichurri, en sí, se consume sin batir, puesto que se pican los tomates y la cebolla en trozos muy pequeños. Como para llegar a esto se necesita mucho tiempo, yo decidí batirlo. Podéis acompañarlo de unas patatas fritas o una ensalada como guarnición.
¡¡Espero que os guste!!
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